Rusia comienza a construir la estructura del avión prototipo del CR929

AeroComposit, una subsidiaria de United Aircraft Corporation (UAC) de Rusia, ha comenzado a trabajar en la estructura del avión chino-ruso, CR929. De acuerdo con los primeros informes, la compañía acaba de comenzar a producir el ala para el avión de fuselaje ancho.

La noticia fue dada a conocer el pasado 19 de noviembre de este año en “Composites without borders”, un foro en línea para fabricantes rusos de materiales compuestos.

“Las líneas de producción de la fábrica de AeroComposit en Ulyanovsk están ocupadas casi al 100%. La fábrica está trabajando en dos proyectos principales. Uno de ellos es la fabricación de las alas y la caja central del MC-21. El segundo: fabricación de alas para el CR929 ruso-chino”, indicó una publicación en el foro, el subdirector general de Irkut, Anatoly Gaydansky.

“Estamos trabajando en los prototipos del CR929 y desarrollando los procesos de fabricación”, agregó Gaydansky.

En septiembre de 2021, la producción del prototipo comenzó oficialmente en la fábrica de COMAC en Linang, aunque no se anunció qué parte del avión se fabricaría en el sitio.

El CR929 fue concebido como una coproducción chino-rusa desde el principio. La mayor contribución de Rusia serán las piezas compuestas que forman la mayor parte del fuselaje, incluidas las alas y el fuselaje.

AeroComposit posee las principales instalaciones de producción de materiales compuestos en Rusia. La compañía fabrica las alas compuestas del avión de pasajeros MC-21, así como algunas partes para el SSJ New, una versión actualizada del jet regional SSJ100.

El CR929 será un avión de pasajeros de fuselaje ancho de largo alcance diseñado para competir con los aviones de fuselaje ancho de Boeing y Airbus, principalmente el 787 Dreamliner y el A330neo.

El avión será producido por CRAIC, una empresa conjunta de COMAC de China y UAC de Rusia.

El proyecto se puso en marcha en 2014, pero se vio frenado por numerosas dificultades. Durante la mayor parte de 2020, COMAC y UAC estuvieron enfrascados en una amarga confrontación por los derechos de venta de la aeronave, lo que provocó retrasos y demoras en las primeras fechas de entrega del avión hasta 2028-2029.