LATAM fija su salida financiera de MASAir como parte de la transformación de su negocio de carga

Por Ricardo J. Delpiano

Tras 18 de años de gestión y operaciones conjuntas, Grupo LATAM Airlines anuncia que ha llegado un acuerdo preliminar para realizar la venta de su participación en Aerotransportes Mas de Carga, conocida comercialmente bajo el nombre de MAS Air. La decisión adoptada en la última junta de accionistas de la empresa se entiende como parte de la reestructuración que general que el principal holding aeronáutico de América Latina está realizando.

Según confirma LATAM, la venta se realizará a un grupo liderado por los actuales accionistas de la empresa. De cumplirse las condiciones estipuladas en el acuerdo, la transacción se ejecutará a principios del mes de agosto del presente año. La compañía declara que “el monto de la transacciones no es considerado material para el Grupo LATAM”.

MAS Air es la tercera de compañía aérea de México con 7,9% del mercado aéreo, ubicándose después de Estafeta, que en primer puesto tiene una participación de 22,0%, seguida de Aerounión con 11,6%. Sin embargo más allá de su participación, es la línea aérea de carga de ese país que alcanza una mayor proyección por las operaciones conjuntas con el resto de las compañías que integran hoy LATAM Cargo, que permiten extender su presencia hacia mercados como Sudamérica y también Europa (vía Miami).

Si bien consiguió aumentar su flota a dos Boeing 767-300F, durante la mayor parte de la gestión sus operaciones las realiza de manera eficiente con una sola aeronave, logro que se alcanza por las sinergias del resto de las líneas aéreas del grupo. Operacionalmente, atiende rutas desde México y Guadalajara hacia los Estados Unidos, Centroamérica y Sudamérica, especialmente hacia Colombia, Ecuador y Venezuela. Como parte de la red de LAN Cargo -y posteriormente, de LATAM Cargo-, las operaciones de MAS Air consiguen aportar sinergias interesantes manteniendo el concepto multihub característico del holding en el transporte de carga.

LATAM mantiene hasta ahora una participación en la compañía mexicana del 39,5%, quedando el restante en manos de otros accionistas. La compañía chilena realiza su primera incursión a principios de la década de 2000 cuando adquiere el 25,0% de la participación, iniciando con esto un proceso de transformación de la línea aérea mexicana que se manifiesta con la incorporación de su primer B767-300F. Posteriormente, la participación de LATAM se incrementa hasta la actual. Además de la participación de la firma chilena, MAS Air está participada por Promotora Aérea Latinoamericana SpA, una sociedad mexicana de capital variable con un 49,0%, y otros inversionistas menores.

La venta de MAS Air se da después de ajustes en el negocio de carga y luego de un positivo 2017, en el que el crecimiento de la industria en este segmento alcanza al 9,0%, siendo el más alto de 2010. No está claro si la venta de la participación de LATAM puede afectar o no las sinergias operacionales desarrolladas en la red de carga. De producirse, el impacto no sería mínimo debido a que las mayores fortalezas están en las rutas desde Norteamérica (hub Miami) hacia Sudamérica y Europa, gestionadas en conjunto por las filiales de Brasil, Chile y Colombia.