Por primera vez, un perro de trabajo militar se lanzó en paracaídas con un sistema de oxígeno puesto. El salto de prueba tuvo lugar durante una campaña de caída libre militar (MFF) por parte de la décima unidad del «Air Parachute Commando» de la Fuerza Aérea francesa en noviembre de este año.
El innovador sistema Arcane (Respirador CANino Adaptativo) desarrollado para la tarea es una máscara de oxígeno regular, en la que se coloca un adaptador canino hermético. El objetivo del proyecto era eventualmente poder integrar un perro en todas las misiones de la unidad de comando, incluso aquellas que requieren paracaidismo a gran altura.
“Como miembro pleno del escuadrón, el perro es fundamental para tener autonomía táctica. Más que un simple refuerzo, nos dimos cuenta de que el perro aporta un activo operativo indiscutible en tierra. Es por eso que queríamos desarrollar nuestra capacidad de lucha mediante la integración de un adiestrador de perros y su compañero de equipo en nuestro grupo MFF”, explicó el teniente Vincent, iniciador del proyecto Arcane.
Laos, un perro adiestrado de 5 años, fue elegido para probar este proyecto de innovación. Un prototipo fue modelado e impreso en 3-D para garantizar que el sistema se adaptara perfectamente a la cabeza de Laos y se mantuviera hermético. Se construyó un maniquí para realizar las primeras pruebas de saltos con el sistema.
Después de casi un año de preparación, Laos finalmente saltó de un C160 Transall del escuadrón de transporte “Poitou”, llevado por su manejador y con el sistema de oxígeno Arcane puesto realizando varios de estos ejercicios durante el mes.
“Después de cada salto, Laos pasó por ejercicios de investigación de mordiscos y explosivos, todos bajo control veterinario” para verificar la condición fisiológica del perro, explicó el teniente Vincent.
Según los informes, las pruebas fueron concluyentes.
