GE Aviation y Safran lanzaron este lunes 14 de junio un programa de demostración y maduración de tecnología bajo su empresa conjunta CFM para una familia de motores de rotor abierto que funcionarían con combustible de aviación 100% sostenible (SAF) o hidrógeno líquido para mediados de la próxima década.
Llamado RISE (Revolutionary Innovation for Sustainable Engines), el programa de desarrollo apunta a una mejora del 20% en el consumo de combustible y las emisiones de CO2 en comparación con la familia CFM Leap actual.
CFM prevé pruebas en tierra en módulos de motor en las instalaciones de GE y Safran a partir de mediados de esta década, seguidas «poco después» de pruebas de vuelo en un banco de pruebas de GE. Eso es según el director ejecutivo de Safran, Olivier Andriès, quien, junto con el director ejecutivo de GE Aviation, John Slattery, organizó una sesión informativa en línea durante la cual también anunciaron la extensión de la asociación CFM hasta 2050.
Andriès enfatizó que el anuncio de RISE no equivale al lanzamiento de un motor, sino más bien a un compromiso formal de continuar con los estudios para un sucesor del Leap en el que GE y Safran han colaborado desde 2019. También apareció en el evento en línea, el vicepresidente de ingeniería de GE Aviation, Mohamed Alim quien calificó el objetivo del 20% de consumo de combustible y reducción de CO2 como «la mejora más grande» que las empresas jamás hayan realizado. Las tecnologías en estudio incluyen avances en arquitectura y materiales, así como electrificación híbrida tanto para el motor como para los sistemas de la estructura del avión.
Un equipo de ingeniería conjunto de GE-Safran ha establecido lo que las empresas llaman una hoja de ruta tecnológica integral, que incluye álabes del fan hechos con materiales compuestos, aleaciones metálicas resistentes al calor, compuestos de matriz cerámica (CMC) y fabricación aditiva. El programa RISE incluye más de 300 componentes, módulos y versiones completas de motores.
“Hay tantas nuevas tecnologías que se están incorporando al programa. Si comienzas con el fan abierto, sobre el cual tenemos mucho conocimiento tácito entre ambas organizaciones… por supuesto, será híbrido eléctrico. Habrá muchos materiales nuevos que traeremos. No tendríamos una marcha en este motor, por supuesto, porque es de rotor abierto», dijo Slattery.
Las empresas planean utilizar un solo rotor en su plan, a diferencia de los diseños de contrarrotación considerados en estudios anteriores, incluido el UDF de GE en la década de 1980 y, más recientemente, los estudios de rotor abierto de Safran desarrollados a través del programa de investigación Clean Sky de Europa en 2017.
“Recientemente pudimos usar estos aprendizajes, en ambas compañías, además de una tremenda utilización de la potencia computacional que estuvo disponible más recientemente. Y ahora podemos convertirlo en un solo fan … y diseñar álabes específicamente para eso. Eso no solo reduce el peso y reduce la complejidad; abre la eficiencia y crea el mismo confort desde una perspectiva de ruido a la que todos los pasajeros se han acostumbrado”, explicó Mohamed Alim.
Andriès agregó que este diseño de rotor abierto no generaría más ruido, ya sea interno o externo, que el Leap de hoy.
Aunque Andriès no estimó un costo de inversión para el proyecto, señaló que Safran se ha comprometido a dedicar el 75% de su presupuesto de investigación y desarrollo a la sostenibilidad y destacó la importancia de las asociaciones gubernamentales, que, dijo, espera plenamente de la Comisión Europea respalde.
Mientras tanto, Slattery prometió que GE comprometería una parte «significativa» de su presupuesto de I+D, el cual alcanzó los $1,800 millones de dólares el año pasado y volverá a hacerlo en 2021.