El pasado 17 de febrero, la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) emitió una Directiva de Aeronavegabilidad (AD) para aviones Boeing 787 Dreamliner, en el cual solicitan al fabricante y operador que inicien una inspección tras informes de descompresión de paneles en el área de sentina.
La descompresión de estos paneles en el área de «sentina» es la parte que divide la sección de carga con la cabina principal de pasajeros, por lo que es de vital importancia realizar las inspecciones correspondientes.
De acuerdo con la FAA, esta directiva afectará a cerca de 222 aviones de este modelo, lo que ocasionará un problema aún mayor para la línea de ensamblaje final de esta aeronave, lo que provocado demoras y retrasos en las entregas.
La FAA estima que dicha revisión y reparación tendrá un costo mayor a los 56 mil dólares y deberá estar reparada en la totalidad de los aviones en cuestión para finales del mes de marzo.
El pasado 24 de septiembre de 2020, la Administración Federal de Aviación (FAA) de los Estados Unidos emitió un boletín especial advirtiendo a los operadores del Boeing 787 Dreamliner sobre la posibilidad de una falla del sistema de director de vuelo del piloto automático (AFDS). El problema se refiere a los modelos Boeing 787-8, -9 y -10.
A finales del 2020, Boeing anunció que como parte de una estrategia de ahorro, decidió consolidar en una sola planta la totalidad de la producción del B787 Dreamliner, por lo que se estima que para mediados de este año sea en la planta de Carolina del Norte, Estados Unidos, la única línea de ensamblaje de esta aeronave.