Emirates, una ansiada llegada con un agridulce sabor

Por Federico Sanz

Todo amante de la aviación admira de una manera u otra a Emirates Airlines. A más de uno se le enchina la piel ver a lo lejos ese bello empenaje, marcando presencia a nivel mundial con sus enormes y elegantes aviones, donde la hospitalidad de su tripulación y la calidad de clase mundial en su servicio la hacen de las mejores en el sector; su famosa primera clase que convierte la cabina de un avión en un hotel 5 estrellas y nos da el único lugar en el planeta donde el A380 esboza el paisaje principal de su aeropuerto en Dubai. No cabe duda de que para muchos, Emirates es y será una inspiración, al igual que es y será para muchos una aspiración llegar algún día a ser parte de esta gran aerolínea.

Hace apenas unos días, en una famosa terraza, presencié por primera vez virar sobre «Plaza» aquel bello empenaje, enfilándose a la famosa pista 05R del aeropuerto de la Ciudad de México. ¡Emirates lo logró! De eso no cabe duda, pero esta vez el sentimiento al verlo pasar fue distinto, en esta ocasión no se me enchinó la piel, esta vez fue más un sentimiento agridulce el que recorría mi pecho.

A mediados del mes de julio, Emirates anunció su vuelo Dubai – Ciudad de México con escala comercial en Barcelona, España, haciendo uso de una quinta libertad; con sustento del convenio de servicios aéreos entre México y Emiratos Árabes Unidos celebrado en 2012 y ratificado por el Senado de la República el pasado 2015, mismo acuerdo que permitió la llegada de Emirates SkyCargo en 2014 a nuestra capital.

De manera muy interesante, en el primer trimestre del 2019 OAG proveedor global, líder de información aeronáutica digital (la cual opera tanto con Aeroméxico y Emirates) dio a conocer las 10 rutas más rentables del 2018 de Latinoamérica. En primer lugar, México-Madrid con ingresos anuales de más de 238 Millones de dólares, donde el mercado México-España es atendido por Iberia en un 36%, Aeroméxico 29%, Air Europa 13%, Wamos Air 11% y Evelop Airlines 11%.

De igual manera, un mes antes del anuncio en junio 2019, se llevó a cabo la “IATA Annual General Meeting 2019” en la ciudad de Seúl, Corea del Sur, el evento más importante de la industria aerocomercial a nivel mundial, donde se dan cita más de mil líderes de casi 300 líneas aéreas miembros de IATA, así como gobiernos, proveedores, socios estratégicos y medios de comunicación. En este evento, Peter Cerdá, vicepresidente regional de las Américas de IATA, expuso el crecimiento de nuestro continente, e hizo nuevamente mención del crecimiento que hubo entre las conexiones de México – España la cual era la número 1 en el sector Latinoamericano.

Esto indicaría las primeras banderas rojas sobre las verdaderas intenciones de la aerolínea emiratí en México.

Una quinta libertad es aquella donde un país A (EAU) quiere llegar a un país C (México) a través de un país B (España), donde en B (España) pueda cargar y descargar pasaje. La palabra clave en la negociación de una quinta libertad en cualquier parte del mundo es reciprocidad, ya que todas las partes del acuerdo deben estar conformes en como este les beneficiará. 

Nuestro país ya ha tenido experiencia previa otorgando quintas libertades. Recordando algunas, la otorgada a Lacsa, actualmente TACA en su vuelo de Costa Rica-México-Los Ángeles; o la otorgada a KLM con la ruta Ámsterdam-México-Guatemala. De igual manera tenemos experiencia recibiendo estas libertades otorgadas en otros países, por ejemplo, el vuelo de Japan Airlines con ruta Tokio-Vancouver-México. En todos los casos anteriormente mencionados, aerolíneas extranjeras estaban transportando carga y pasajeros que nuestras aerolíneas nacionales no, donde en ninguna de las negociaciones bilaterales se logró que México saliese beneficiado.

¿Por qué México aceptó una quinta libertad que no le otorgó reciprocidad?

¿Por qué México debe de aceptar una quinta libertad que no le otorga reciprocidad, no hemos aprendido la lección?

Es importante destacar que pese a que nuestra industria aérea crece año con año, es de vital importancia seguir protegiendo el crecimiento de aerolíneas locales, ya que a nivel mundial estas siguen siendo vulnerables ante aerolíneas de mucho mayor tamaño, las cuales podrían afectar directamente al crecimiento de las mismas hasta causar daños financieros irreversibles. Es por esta razón que generaciones de pilotos, sindicalistas y gobernantes han luchado y legislado a favor del mercado aéreo mexicano, para que fuese de los mexicanos y beneficiase a los mexicanos

Por otro lado, la emiratí menciona que el principal y único objetivo (además del económico) de la ruta, es poder aportar turismo de los Emiratos Árabes Unidos a México, mencionando que el numero turistas entre los países ha ido en aumento año con año. Sin embargo, en la conferencia de prensa dada sobre la apertura de la ruta en el mes de octubre, Scott Lantz, director de región LATAM de Emirates, comentó lo siguiente a la pregunta de si estarían dispuestos a operar la ruta Dubái-México con una escala técnica en vez de comercial en Barcelona:

 “Con el Memorándum de acuerdo, la compañía tiene el derecho de operar el tramo Barcelona–México transportando pasajeros y sin ese beneficio la ruta no sería rentable.”

Esto hace inevitable poner algunas preguntas sobre la mesa:

  1. ¿Emirates realmente está interesado en llegar al mercado mexicano para traer turismo, o sólo quiere una parte de la “tajada” de la ruta más rentable de Latinoamérica?
  2. ¿Si el turismo entre los Emiratos Árabes Unidos y México fuese lo suficientemente grande, no bastaría con simplemente hacer una parada técnica en España y después continuar hacia nuestro país, justo como lo hace Turkish Airlines en Cancún?
  3. ¿Por qué esta aerolínea no hace efectiva su quinta libertad desde Zaragoza como ya lo hace con sus vuelos de Emirates SkyCargo, o desde cualquier otra ciudad que este desatendida entre México y España?

Por ahora la mejor respuesta de las primeras dos preguntas la tenemos cada uno de nosotros, a no ser que Emirates pueda responder de manera directa y con hechos; para que de esa forma podamos comprender mejor sus intenciones dentro de nuestro territorio nacional. Por otro lado es clara la ventaja que Barcelona tiene frente a otras ciudades españolas excluyendo a Madrid, esta tiene conexión directa a todas las capitales importantes dentro de Europa, así como conexiones a países de Asia y África, logrando no solamente el tomar demanda de la ruta MEX-ESP, sino que también acapara demanda de México a Europa, Asia y África compitiendo de manera directa con aerolíneas nacionales como internacionales que vuelan sin uso de quintas libertades atendiendo en primer lugar el mercado México-España (mercado que Emirates menciono estaba desatendido) y en segundo lugar el mercado México-Europa.

Dentro de esto no cabe la menor duda que Aeroméxico, la aerolínea bandera de nuestro país, tendrá que mejorar sustancialmente sus precios, así como sus servicios; ya que con la polémica que ha desatado en redes la llegada de Emirates a México, ha dejado un claro descontento social por la manera en que están brindando los mismos. A fin de cuentas, como diría un familiar, cada obstáculo es una oportunidad disfrazada para brillar, y espero que Aeroméxico pueda utilizar toda esta retroalimentación de lo que verdaderamente quieren sus pasajeros, mejorar como empresa, competir en precios, dar un excelente servicio y poner en lo más alto la bandera de nuestro país a nivel internacional, demostrando que pueden competir contra cualquier aerolínea.

Se espera igualmente que el gobierno Federal nos comparta un poco más de información sobre cómo se brindó este permiso, y cómo se prevé que el mismo vaya a aportar crecimiento positivo en la industria aérea nacional a largo plazo, y no sólo un beneficio temporal, como lo podrían ser boletos más baratos. Pues en un futuro, cuando nuestras aerolíneas nacionales quieran expandirse a otros mercados internacionales (mayormente hacia Europa), es posible que vean un impedimento en su antiguo socio. Interjet logró una gran posición al tener de su lado esta gran aerolínea, aunado a que ambas podrían estar abiertas a un posible cambio de aeropuerto llegado su momento, una a través de negociaciones financieras y otro devolviendo favores.

Por ahora simplemente seguiré disfrutando las aproximaciones y salidas de este hermoso avión, con ese sentimiento agridulce de ver la aerolínea que tanto admiro, pero que quizá se esté aprovechando de mi país.