El pasado 22 de agosto un avión Boeing 737 de United Airlines programado para volar de Newark a Denver rodó durante tanto tiempo en el aeropuerto de salida que, finalmente, se quedó sin el combustible adecuado para completar el vuelo.
La aeronave, un B737-900ER rodaba para volar a Denver, sin embargo, el avión permaneció en la pista y en las calles de rodaje durante más de seis horas antes de que se cancelara el vuelo.
Según los informes, los retrasos iniciales se debieron a tormentas eléctricas. La aeronave rodó durante unas tres horas antes de regresar a la puerta de embarque.
“Además de rodar durante horas, el control de tráfico aéreo nos dio una ruta de vuelo más larga a Denver para evitar tormentas persistentes. Lo que significa que no nos queda suficiente combustible para llegar al destino”, señaló el capitán
Finalmente, después de permanecer en la pista durante otras ocho horas y media el vuelo se canceló y los pasajeros desembarcaron del avión.
“Oh, Dios mío, después de 8.5 horas en la pista de Newark, y desembarcar/reembarcar/repostar el avión, el vuelo es imposible”, tuiteó la reportera del New York Times, Hiroko Tabuchi.