El fabricante europeo Airbus anunció este jueves que buscará «una evaluación legal independiente» para resolver su disputa con Qatar Airways sobre lo que el fabricante llama una caracterización errónea en curso de la degradación de la superficie entre la flota de aviones A350 de la aerolínea de bandera qatarí.
Qatar Airways suspendió recientemente 19 de sus Airbus A350 debido a lo que llamó una condición «acelerada» que afecta la superficie compuesta de la aeronave debajo de la pintura, según lo ordenado por la Autoridad de Aviación Civil de Qatar (QCAA). Como resultado, la aerolínea nacional planea reintroducir «a la fuerza” al servicio temporal cinco de sus 10 Airbus A380 actualmente en tierra debido a lo que llama una escasez de capacidad causada por la puesta en tierra de los A350. Los planes exigen que la aerolínea ponga en servicio los superjumbos en «rutas clave de invierno», incluidos los aeropuertos de Londres Heathrow y París Charles de Gaulle a partir del 15 de diciembre.
Sin embargo, Airbus insistió este jueves en que evaluó minuciosamente los hallazgos relacionados con la pintura de la superficie y que la Agencia Europea de Seguridad Aérea confirmó que no presentaba ningún efecto de aeronavegabilidad en la flota A350.
La brecha entre Airbus y Qatar Airways culminó con los comentarios recientes del director ejecutivo de la aerolínea, Akbar Al Baker, que indicaron que el problema también afecta a los A350 que vuelan para otras aerolíneas, y que Airbus aún tiene que comprender la causa subyacente.
«El intento de este cliente de tergiversar este tema específico como un problema de aeronavegabilidad representa una amenaza para los protocolos internacionales en materia de seguridad», dijo Airbus en un comunicado, sin nombrar directamente a Qatar Airways.
El constructor insistió en que ha «trabajado activamente» con los clientes para minimizar el efecto de la condición y cualquier inconveniente que pudiera haber causado.
«Todas estas soluciones han sido descartadas por el cliente mencionado anteriormente sin una justificación legítima. Paralelamente, Airbus está trabajando para restablecer un diálogo constructivo con su cliente sobre este asunto, pero no está dispuesto a aceptar declaraciones inexactas de este tipo para continuar», agregó Airbus.
Por otra parte, Airbus dijo que quiere aclarar que la reciente propuesta de EASA de medidas correctivas impulsada por el descubrimiento de áreas en las que falta una lámina de cobre expandido (ECF) en las alas de 13 A350 como resultado de un proceso de producción, no se relaciona con el problema de la degradación de la superficie.
«El número limitado de aviones se inspeccionará según la directiva de EASA», concluyó Airbus.