Los aviones Boeing 777-200 de United Airlines, propulsados con motores Pratt & Whitney, podrían permanecer en tierra hasta principios de 2022. Mientras tanto, la Administración Federal de Aviación (FAA) aún considera si se deben aplicar nuevos requisitos antes de devolver el modelo al servicio.
De acuerdo con fuentes cercanas a este tema, United Airlines había planeado devolver sus aviones Boeing 777-200 con motores Pratt & Whitney al servicio de pasajeros para el verano de 2021. Sin embargo, la aerolínea aún no ha decidido sacar de su puesta en tierra las aeronaves debido a que la FAA sigue dudando si es necesario algún nuevo requisito para la variante del avión.
Según los informes, la autoridad de aviación considera proponer una inspección adicional de los álabes del motor, así como algunas modificaciones que deberían funcionar como medida de precaución para evitar que éstas y las cubiertas de motor se rompan o dañen.
Recordemos que United Airlines dejó en tierra 24 aviones Boeing 777-200 con ciertos motores Pratt & Whitney PW4000 en febrero de 2021. La medida fue la respuesta de la aerolínea al incidente durante el vuelo UAL328 en el cual un 777-200, que operaba la ruta desde Denver, Estados Unidos, a Honolulu, Hawái, sufrió una falla incontenible en el motor, esparciendo partes de este en varios condados alrededor de Denver.
Tras el incidente, Boeing solicitó la puesta a tierra de 128 aviones en todo el mundo en espera de una inspección de seguridad.
En reacción a la situación, la FAA emitió una directiva de aeronavegabilidad de emergencia (AD) que exige a los propietarios y operadores de los motores Pratt & Whitney PW4000-112 a que realicen inmediatamente una inspección de imagen termoacústica antes de cualquier vuelo posterior.
De acuerdo con registros en internet, United Airlines es la única aerolínea en los Estados Unidos que solía operar activamente la variante Boeing 777-200 antes del incidente.