Más restricciones para acceder a cabina de pilotos

Por José Suárez

Hoy justamente se cumplen 20 años de aquel 11 de septiembre de 2001 en el que la aviación cambió de manera radical; y es que entre otras normativas se blindaron las cabinas de pilotos.

Y se blindaron en muchos sentidos, primero que nada literalmente, se cambiaron las puertas por unas blindadas y en segundo se blindó el acceso a las mismas. Lejos estamos de esa aviación en la que un niño curioso podía enamorarse de la profesión de piloto al visitar a la cabina y saludar al capitán.

Y esa es justamente la antítesis de este 2018, en vísperas de una escasez de pilotos en México y el mundo se coloca una nueva restricción que pone a todos los pilotos mexicanos en una jaula de cristal: la cabina. De acuerdo a la circular obligatoria  DGAC COAV-55/18 emitida el 10 de septiembre de 2018 por la Dirección General de Aeronáutica Civil de México se elimina la posibilidad en todas las aerolíneas de México para transportar a pilotos como prestación al utilizar el asiento de observador.

Entendemos la raíz del problema, sin embargo, todos los pilotos estamos siendo estigmatizados no solo socialmente por los hechos ocurridos en Durango, sino hasta en nuestra propia industria. Estamos en un país de sanciones en donde estamos lejos de valorar a los miles de pilotos profesionales que diariamente surcamos los cielos del mundo esforzándonos por dar lo mejor de nosotros en pro de nuestras aerolíneas y nuestra industria. Me atrevo a decir que los pilotos somos los empleados que más queremos y cuidamos  nuestro trabajo.

En otros países, existe el uso regulado del jumpseat, como en Estados Unidos en donde existe un convenio de reciprocidad entre todas las aerolíneas para que cualquier piloto pueda utilizarlo. De acuerdo a ALPA y a su sitio jumpseatinfo.org el piloto viajando en cabina es considerado un miembro de la tripulación y debe cumplir una serie de requisitos. Su máxima es «Viajar en el jumpseat es un privilegio y no un derecho».

Si, debemos afrontar las consecuencias y como siempre lo decimos, debemos hacer a la aviación más segura. Debemos buscar mecanismos que regulen de manera ordenada y sobre todo segura el acceso a la cabina para pilotos que por necesidades personales tienen que transportarse, tal y como sucede en todo el mundo. La Organización de Aviación Civil Internacional reconoce el uso del jumpseat al igual que la TSA y la FAA.

Tal parece que México hoy le quita un voto de confianza a todos sus pilotos. ¿O no es cierto que 6 ojos ven mejor que 4?